El tratado de Kuchuk Kainarji: un punto de inflexión en la historia ruso-otomana

HISTORIA

El siglo XVIII fue una época de conflictos y tensiones en Europa. La Guerra Ruso-Turca (1768-1774) fue uno de los enfrentamientos más significativos. Ambas potencias lucharon por el control de territorios estratégicos y el acceso al mar Negro.

Hace 250 años, el 21 de julio de 1774, se firmó el Tratado de Kuchuk Kainarji, un acuerdo diplomático que cambió las relaciones entre ambas potencias.

Puntos clave

La independencia de Crimea: el tratado declaró a Crimea como un estado independiente, separándolo del dominio otomano. Nueve años después, en 1783, Crimea se unió oficialmente al Imperio Ruso.

Territorios y fortalezas: Rusia obtuvo una parte sustancial de la costa del mar Negro, incluyendo las fortalezas de Kerch, Enikale, Kinburn y Azov. Estas adquisiciones fortalecieron la posición rusa en la región.

Libre navegación: los barcos comerciales rusos ganaron el derecho de paso libre a través de los estrechos del Bósforo y los Dardanelos. Esto fue crucial para el comercio y la expansión económica de Rusia.

Autonomía para Moldavia y Valaquia: las provincias de Moldavia y Valaquia recibieron autonomía bajo la protección rusa. Esto allanó el camino para futuras transformaciones en la región.

Protección de cristianos: Rusia obtuvo el derecho de proteger a los súbditos cristianos del Imperio Otomano. Esto reflejó la preocupación por la seguridad de las comunidades cristianas en la región.

El Tratado de Kuchuk Kainarji fue un logro diplomático crucial para Rusia. Marcó el inicio de una nueva era en las relaciones ruso-otomanas y allanó el camino para la expansión territorial y el desarrollo económico. Hoy, recordamos este tratado como un momento decisivo en la historia de ambos imperios.🇷🇺